El 2021 ha sido un año de pocas novedades a nivel jurídico para la oficina de farmacia, pero de pasos sustanciales de cara al futuro de la misma. Por eso se puede hacer balance de cómo les ha ido el pasado año a las farmacias. Sobre todo, en localizaciones como la Comunidad de Madrid, donde dos fueron los aspectos a destacar: por un lado, la nueva ley de ordenación farmacéutica ha venido a abrir el debate sobre lo necesario que es regular ciertos aspectos en torno a la farmacia que continúan quedando sin atar pese al avance del sector y de la propia sociedad. Y por otro, el concurso de nuevas aperturas de farmacia, también en la Comunidad de Madrid, que los farmacéuticos llevaban esperando desde hace ya varios años.
Dentro de este balance para las farmacias y tal y como explica Adela Bueno, responsable del departamento Jurídico de Asefarma, el Anteproyecto de Ley llegó “para dar respuesta a las demandas de los profesionales sanitarios que esperaban una modernización de la actual Ley de Ordenación farmacéutica”. El primer paso está dado, sin embargo, Bueno comenta que “este Anteproyecto no ha satisfecho las expectativas de cambio de todos los profesionales”. Y adelanta que “el anteproyecto sufrirá variaciones”. Cabe destacar así que recientemente se ha publicado su segunda versión. Que además ha sido objeto de trámite de audiencia e información pública. Sobre ella, se han ido formulando las sugerencias y alegaciones de los profesionales del sector.
Algunos puntos a destacar del Anteproyecto…
Como puntos a destacar del mencionado Anteproyecto de Ley, desde el departamento Jurídico de Asefarma puntualizan los siguientes:
- Inclusión de la dispensación a domicilio informada
- Inclusión de la sección de nutrición y dietética en la farmacia
- Posibilidad de publicidad en la farmacia
- Aumento de la flexibilidad horaria
- Endurecimiento de las sanciones aplicables a posibles infracciones cometidas
El otro “punto caliente” a nivel jurídico en 2021 fue la convocatoria para la adjudicación de 21 nuevas farmacias en la Comunidad de Madrid. “Que darán cobertura al incremento de población en núcleos urbanos de municipios como San Sebastián de los Reyes, Boadilla del Monte, Brunete, Galapagar o Aranjuez. Tal y como puntualiza Adela Bueno, “este concurso se encuentra en tramitación. Y está esperando a que a lo largo de 2022 se proceda a su finalización y adjudicación total”.
En el balance para las farmacias: lento avanzar de la venta online
Para finalizar, la responsable del departamento Jurídico de Asefarma ha querido hacer mención a que la venta online en la farmacia continúa lenta, pero avanza poco a poco.
Adela Bueno explica que “el número de oficinas de farmacias que se ha iniciado en el canal de venta online ha experimentado un incremento en torno a unas noventa frente al pasado año”. Y, aunque es evidente que ha crecido el número de transacciones online de parafarmacia y medicamentos no sujetos a prescripción médica como consecuencia de la crisis sanitaria, “la venta directa de medicamentos no sujetos a prescripción médica en la sede física de la farmacia sigue siendo la opción elegida por el cliente. Poniéndose de manifiesto el papel del farmacéutico imprescindible en la atención primaria. Y también siendo el modelo de dispensación personalizada y directa en mostrador la preferida por los pacientes”. Es decir, se sigue prefiriendo la atención. Pero también el contacto con el profesional sanitario. Y el tú a tú delante del mostrador.
Esto sirve como refuerzo al argumento que indica que tanto los farmacéuticos como las propias oficinas de farmacia “son el primer eslabón de la atención primeria en la sociedad”. Todo ello, gracias a su intervención “en las crisis sanitarias, el seguimiento farmacológico que se hace de los pacientes, el impulso en la recogida de los medicamentos caducados. Y, sobre todo, en la promoción de la importancia de la atención farmacéutica que se realiza desde todas las áreas del propio sector”, explica Bueno.
Confianza en el profesional farmacéutico como profesional sanitario
En definitiva, todo evidencia que la crisis sufrita y que aún seguimos padeciendo “con motivo de la pandemia originada por el COVID-19 muestra que el paciente confía en el farmacéutico como profesional sanitario”, indica Adela Bueno.
El paciente consume productos de la farmacia, es cliente de sus promociones y ofertas, pero sobre todo “sabe que el farmacéutico está perfectamente capacitado para ofrecer otros servicios asistenciales, así como una primera atención sanitaria básica”.
Por su cercanía a la población y su disponibilidad, “sin duda sigue siendo necesario y fundamental potenciar el papel del farmacéutico comunitario en el ámbito de los servicios asistenciales. Porque su intervención se traduciría en una mejora para el adecuado uso de los medicamentos. También para la atención sanitaria. Y para la promoción de la salud en general”, concluyen desde el departamento Jurídico de Asefarma.
