Redes neuronales, networking, ingeniería o robotización se dan la mano en ocasiones para ayudar a la farmacia a optimizar todos sus procesos internos, como dejaron claro los ponentes que participaron en la mesa redonda moderada por Belinda Jiménez, responsable del grupo de compras Puntofarma, el pasado 29 de mayo en la Academia de Cine de Madrid.

 

Jiménez destacó que las nuevas tecnologías incidían muy positivamente en aspectos internos como “la gestión de las compras o la gestión del stock. Todos ellos, aspectos claves para la buena marcha de la farmacia, a la que las nuevas tecnologías pueden ahorrarle tiempo y energía”.

 

“Experiencia, aspectos de mejora y claves para optimizar la gestión de la farmacia, serán alguno de los puntos destacables de esta mesa”, destacó la responsable del grupo de compras Puntofarma.

 

Y hablando de tiempo, Jesús córdoba, farmacéutico comunitario y usuario de robots de dispensación Willach, compartió con todos los asistentes su experiencia que muchos años se vio empañada por la cantidad de tiempo que le llevaba realizar toda la organización interna de su farmacia. “Pedidos que entraban, pedidos que tenían que salir… Un día decidí automatizar y esa automatización me permitió obtener mucho tiempo que pude dedicarlo a otras cosas. Soy usuario de Willach desde 2007 y me ha cambiado mi forma de gestionar mi farmacia”, explicó.

 

El ahorro de tiempo fue una máxima a lo largo de todo el discurso de Jesús Córdoba, quien destacó que “es vital resolver la alta rotación de la farmacia, porque esto puede resolverte toda la semana. Y no sólo a ti como titular de la farmacia, sino también a todo tu equipo, que puede dedicarse a otras funciones de gestión interna”, añadió.

 

Ingeniería y redes neuronales también tienen que ver con la farmacia

 

Ahorro en el tiempo y ahorro en el control de procesos también fueron puntos destacables en la exposición de José María Cabria, Product Marketing Manager de AKO Frío industrial, quien describió la funcionalidad de uno de sus productos, enfocado al control de las caducidades y temperatura de los medicamentos que se encuentran en la farmacia.

 

“El farmacéutico trabaja para mejorar su gestión, siempre y en cualquier momento de su carrera entiende que cuenta con la opción de mejorar la eficiencia de los recursos que tiene en su farmacia”, explicó Cabria. Así, “conviene asegurar las condiciones de temperatura necesarias para los medicamentos, por ejemplo, sobre todo las de los medicamentos termolábiles, que tanta atención requieren por parte del farmacéutico”.

 

Cabria coincidió con Jesús Córdoba en que la optimización de los recursos y de la gestión ayudan al farmacéutico a dedicar ese tiempo que se ahorra y dedicarlo a otras funciones. Optimización también en cuanto al nivel de respuesta que el profesional obtiene de las nuevas tecnologías, ya que, en la mayoría de las ocasiones, la respuesta que obtiene el farmacéutico es inmediata.

 

Por su parte, Luis Martín, CEO de Luda Partners, desarrolló una ponencia basada en la interconexión entre las farmacias. Es importante que las 22.000 oficinas de farmacia en España estén conectadas y se unan porque, actualmente, “no tenéis una red que os permita hablar entre vosotras” y este aspecto es, precisamente, el que potencia “nuestro sistema, que os permite interconectaros, manteneros en contacto y a la vez ofrecer al cliente esa cercanía que tiene de por sí en la farmacia de la calle”, explicó. La idea, por tanto, consiste “no en competir en precio, sino en trasladar el modelo de farmacia a una red neuronal, que sea la farmacia más cercana la que finalmente provea el producto al cliente”. Y esto sólo puede conseguirse a través de las nuevas tecnologías.

 

La farmacia, una realidad amenazada

 

La farmacia en 2019 es una realidad amenazada. Así comenzó la ponencia de José Antonio López Arias, de Farmacia Farmazul. Esto se debe a dos circunstancias:

 

• El incremento de terapias de gestión hospitalaria

 

• Las farmacias sólo tienen un pagador, que además está sometido a presiones presupuestarias.

 

En este entorno explicó que “surgen nuevos canales, que usan herramientas tecnológicas para aproximarse a la venta”, algo en lo que están ayudando las nuevas tecnologías, que han entrado de lleno en nuestra sociedad, de tal manera que han cambiado también la forma de recibir los mensajes y los canales a través de los que se envían.

 

Como explicó López Arias, “la omnicanalidad no tiene sentido si no se tiene en cuenta que es necesaria la omniconectividad”. Y al hablar de omnicanalidad “no estamos hablando de tecnología orientada a mejorar los procedimientos de la farmacia, sino de tecnología de inteligencia de datos (ser capaz de explotar los datos que percibimos), comunicarnos con el consumidor final y, sobre todo, prestar servicios (logística, servicios de salud, robots…etc.)”. En definitiva, “estamos hablando de un consumidor con más información, que exige más valor y un consumidor conectado. Al que le hacemos la vida más fácil y al que facilitamos también el servicio que le prestamos desde nuestra farmacia”.

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