Trabajar como farmacéutico es una decisión, en la mayoría de los casos, vocacional. Otros profesionales se decantan por esta profesión para continuar la tradición familiar y otros, de espíritu curioso, porque se ven atraídos por una profesión que aúna investigación, gestión empresarial y sanidad. Todo a una.

El sector es muy estable, tanto dentro como fuera de España, ofrece un clima de tranquilidad laboral a los profesionales que se adentran en él. En países como EE.UU., Canadá, Suiza, Australia o Noruega, ser farmacéutico es pertenecer a una profesión con salarios atractivos, entornos laborales favorables y con amplias oportunidades de empleo.

No obstante, el modelo farmacéutico español, mediterráneo, siempre ofrecerá unas características envidiables por su capilaridad, por la presencia de más del 70% de farmacias fuera de capitales de provincia y por la seguridad que le da al paciente saber que siempre, siempre y siempre, va a encontrar una farmacia cerca de él, con un profesional que le pueda solucionar sus dudas sobre salud y una respuesta ante sus necesidades sanitarias. Algo que alaban tanto los pacientes-clientes y que, siempre que se tiene ocasión, ensalzan representantes de instituciones como el CGCOF u organizaciones como SEFAC. La farmacia española, además, ofrece servicios asistenciales que son muy valorados por el paciente.

Sin embargo, la posibilidad de irse fuera de España a trabajar como farmacéuticos en el extranjero puede estar presente en la mente del profesional En este caso, conviene conocer antes las características del país al que se va a ir y lo que cada uno tiene que ofrecer al farmacéutico que se marcha.

¿Cuál es el mejor país para trabajar como farmacéutico?

España es un gran país para el farmacéutico. Por su modelo mediterráneo, por su capilaridad y por el eficiente e inmediato servicio sanitario que ofrecen a la población. Como apuntan desde algunos medios, la farmacia española es el espejo en el que se miran muchos países europeos.

En Europa, otros países, ofrecen también múltiples oportunidades laborales y de aprendizaje al farmacéutico. Alemania es uno de los países con más atractivo para trabajar como farmacéutico. Por sus condiciones laborales. Sin embargo, es Dinamarca el que ofrece mayores sueldos a estos profesionales. Sin dejar atrás, Reino Unido y Noruega.

Recientemente, el diario especializado Apotheke Adhoc publicó los resultados de una interesante encuesta en la que se preguntaba sobre las condiciones laborales de los farmacéuticos en los países del norte y del sur de Europa. Las conclusiones que se extrajeron de dicho informe fueron que existían enormes diferencias, sobre todo a nivel salarial entre lugares como Alemania y Dinamarca, si se comparaba con otros como Portugal o Italia.

Estados Unidos

Estados Unidos es considerado como uno de los mejores países para trabajar como farmacéuticos en el extranjero. Esto es así debido a sus altos salarios y a interesantes oportunidades de empleo.

La remuneración de los farmacéuticos estadounidenses es bastante competitiva. Y el país cuenta con una nutrida red de farmacias y centros sanitarios que demandan profesionales que estén altamente cualificados. Así, las oportunidades de especialización y desarrollo profesional son grandes, lo que permite a los farmacéuticos avanzar en sus carreras y explorar diversas áreas de la farmacia clínica e industrial.

Canadá

También en el continente americano, Canadá es otro lugar atractivo para trabajar como farmacéutico. La razón es que Canadá es un país que ofrece, por lo general a todos los profesionales, una alta calidad de vida. En el caso de los profesionales farmacéuticos, sus salarios son muy competitivos. Y el sistema sanitario canadiense es conocido también por su eficiencia y accesibilidad por lo que las condiciones de trabajo son muy buenas. Formación continua, desarrollo profesional, son también puntos a favor de decantarse por trabajar como farmacéutico en Canadá. profesional, ofreciendo programas de capacitación y especialización para farmacéuticos.

 En Europa

Países de Europa como Suiza o Noruega, son también muy buenas opciones para ser farmacéuticos.

En el caso de Suiza, destaca este país sus altos estándares de vida además de por sus salarios atractivos para los farmacéuticos. El salario medio anual de un farmacéutico en es, de hecho, uno de los más altos del mundo. Suiza cuenta con un sistema de salud de gran calidad y suele demandar gran número de profesionales sanitarios.

Noruega, también ofrece a este tipo de profesionales gran calidad de vida y altos salarios.  Además, el sistema de salud noruego es conocido por su eficiencia y accesibilidad, y ofrece numerosas oportunidades de empleo en farmacias y hospitales.

Al otro lado del mundo, en Oceanía, Australia, conocida por su mercado laboral favorable para profesionales como el farmacéutico. Tiene un sistema de salud muy bien desarrollado y muchísimas oportunidades de empleo en farmacias comunitarias, hospitales en incluso en la industria farmacéutica.

España no presenta altos salarios, pero sí el que, dicen, es el mejor sistema sanitario del mundo.

Aspectos generales a tener en cuenta para trabajar como farmacéuticos en el extranjero

Antes de decidir salir a trabajar como farmacéuticos en el extranjero, el profesional debe tener en consideración algunos aspectos clave que seguro le ayudarán a tomar la decisión.

El primero es el idioma. Sea inglés, francés o alemán el idioma que se hable en el país al que se tiene pensado desplazarse, conviene prepararse antes y aprenderlo. Esto facilitará tanto los trámites como el desenvolvimiento del profesional en el país de destino.

Las exigencias generales suelen oscilar entre el nivel B1 y C1 de inglés. Y en aquellos países en el que el idioma no sea éste, es muy probable que el requisito sea tener cierto nivel también del idioma oficial del destino. Por lo general, lo habitual es que del nivel que se solicite sea el C1 de inglés.

Se requiere también contar con el título de Grado o Licenciatura en Farmacia. Y licenciados y graduados deberán solicitar en el país al que se dirigen, la convalidación de su título, requisito indispensable para poder trabajar en cualquiera de los países de la UE. Deberán tener también certificado de colegiación, con validez mínima de 3 meses, en caso de que el profesional haya estado colegiado en España.

En algunos países se pide además tener cierta experiencia en la profesión, cursos de posgrado o ser capaces de desarrollar habilidades determinadas que pueda exigir el puesto de trabajo.

Valor, ánimo, ilusión y vocación, serán otros aspectos que deberá meter en la maleta el profesional que quiera salir fuera de España para trabajar. Y no olvidar nunca por qué decidió ser farmacéutico. Porque ese amor a la profesión será el ancla al que podrá agarrarse cuando trate de recordar por qué se marchó.