Tras decretarse el estado de alarma el pasado 15 de marzo de 2020 como medida para evitar la propagación del coronavirus (COVID-19) en España, las oficinas de farmacias son uno de los pocos establecimientos que pueden permanecer abiertos. Gracias a su importante papel como establecimiento sanitario de cara a la población.
Cada día, los farmacéuticos están atendiendo numerosas consultas, dispensando medicamentos. Y además respondiendo a las consultas sobre salud que les trasladan los clientes.
Por ello, al estar tan expuestos, deberían seguir una serie de medidas tanto de higiene como de seguridad. Con el objetivo de prevenir cualquier posible contagio dentro de la farmacia. Por parte del titular como del resto del equipo de la misma.
Detallamos a continuación, las medidas que consideramos son básicas y elementales en estos momentos:
INFORMACIÓN Y COMUNICACIÓN HACIA EL PACIENTE SOBRE COVID-19
– Informar y asesorar al paciente siguiendo las recomendaciones de Sanidad.
– Promocionar la prevención de la enfermedad, con carteles informativos y mensajes
– Derivar al paciente con sintomatología. Habría que aislar al paciente en una habitación hasta avisar a equipos médicos.
EXISTENCIAS Y PRODUCTOS MÁS DEMANDADOS EN LAS FARMACIAS
En cuanto a guantes y mascarillas: es recomendable disponer y distribuir racionalmente. Y con un sentido de servicio a la población de material de apoyo de suministros médicos y dispositivos de protección personal – Guantes y mascarillas (al menos de protección FFP2, FFP3).
También los geles desinfectantes e hidroalcohólicos son otro de los productos más demandados en estos momentos de crisis sanitaria. Conviene aprovisionarse bien para disponer de ellos para la venta.
OTRAS MEDIDAS A SEGUIR EN LA CRISIS SANITARIA DENTRO DE LA FARMACIA
– Incrementar las medidas de higiene dentro de la farmacia. No sólo a través del continuo lavado y desinfección de manos, sino también con desinfección de superficies
– Mantener la distancia de seguridad interpersonal de 1 metro
– Tener prevista una zona reservada en la farmacia comunitaria donde poder trasladar a una persona con síntomas. Si se diera el caso, se recomienda que el personal que le traslade hasta la zona reservada, se coloque mascarilla.
– Evitar aglomeraciones dentro de la farmacia.
– Limpiar y desinfectar frecuentemente las zonas de atención.
– Instalación de mamparas protectoras en los mostradores de la farmacia.
INDICACIONES PARA EL PERSONAL DE LA FARMACIA ANTE EL CORONAVIRUS:
– No hacer uso generalizado de las mascarillas. Cuyo uso se recomienda en caso de contacto directo con el paciente (toma de tensión, pruebas bioquímicas, etc.)
– Aplazar visitas a laboratorios
– Si presenta síntomas, permanecer en su domicilio
Con todo, además será necesario, tanto a nivel de establecimiento abierto al público como a nivel personal, mantener unas condiciones óptimas de higiene. Y seguir las recomendaciones que al respecto han aportado instituciones como la Organización Mundial de la Salud. Tales como el lavado frecuente de manos con agua y jabón. O en su defecto, con gel hidroalcohólico. Mantener una distancia de 1m respecto al resto de personas, al toser o estornudar. También taparse la boca con un pañuelo desechable (y tirarlo inmediatamente tras su uso) o con el codo flexionado. Por último, no consumir animales poco cocinados o crudos.
En definitiva, ser prudentes, respetuosos con los demás. Y seguir las recomendaciones desde las diferentes instituciones Sanitarias como desde la Organización Mundial de la Salud. Éstas nos dan serán las recetas básicas para evitar el contagio por coronavirus. En nuestras manos está hacerlo.
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