De cara a la viabilidad y una óptima rentabilidad, a partir del proceso de compra de una farmacia es parte fundamental desarrollar un buen plan de negocio. Éste permitirá definir los puntos claves de la gestión como la estructura organizacional, los objetivos y la estrategia. Así como la inversión a realizar, qué servicios trabajar y cuáles pueden ser los más diferenciadores frente a la competencia, etc. Todo esto, claro está, bajo un contexto reglamentado que limita principalmente en algunos puntos, el poder de acción de la oficina de farmacia.
Una vez desarrollado el plan de negocio y sobre todo teniendo en cuenta el proceso de post-compra de la farmacia en el que puede encontrarse, el farmacéutico necesita también definir un plan estratégico como herramienta que le va a establecer cómo gestionar la farmacia. Y así poder alcanzar sus objetivos. Para su desarrollo, el plan estratégico tiene que ir de la mano también de un plan de acción como guía para conseguir los objetivos y que establece el cómo, el cuándo y quién ejecutará.
¿Cómo planificar la post-compra de una farmacia?
El punto de partida para el desarrollo del plan estratégico de la farmacia que se adquiera, es el análisis de su situación inicial. Esto se hace a través de la realización de un estudio de potencialidad. Y está centrado en los cuatro pilares de gestión sobre los que debe sustentarse el proyecto de una farmacia:
- CLIENTE
- EQUIPO
- ALMACÉN
- ESPACIO DE VENTA.
Disponer de conocimiento sobre el cliente de la farmacia, permite al gerente determinar los servicios a desarrollar, el surtido de productos, la política de precios y todas las acciones promocionales.
De la misma forma, es muy importante también conocer al equipo y el clima laboral en el que desarrollan sus tareas para definir un plan de motivación adaptado perfectamente a cada uno de ellos. A partir de aquí se puede organizar también su trabajo con el fin de que desarrollen una óptima atención farmacéutica.
El almacén es otro aspecto de análisis imprescindible en el momento de inicial de la farmacia. Una correcta gestión de compras y ventas debe adecuarse siempre al stock inventariado en la farmacia. Este aspecto va a verse influenciado también por los hábitos de compra del cliente, así como por los proveedores, en cuanto a condiciones comerciales y servicio, por la demanda de mercado y la competencia.
El último pilar de gestión es el espacio de venta. Conocerlo y redimensionarlo va a permitir poder definir cómo se distribuye la farmacia en cuanto a las categorías y su grado de desarrollo. Con lo que también hay que tener la tipología y características del cliente potencial.
Con todo esto y en su misión de asegurar una transición sin problemas, Asefarma ofrece a sus clientes en el momento de la compra de farmacia, un servicio completo de acompañamiento inicial, en el que se incluye formación completa para el titular, asesoramiento en compras y un estudio de potencialidad de la farmacia para el desarrollo del plan estratégico de su farmacia.