El origen de las Farmacopeas nace de la necesidad de unificar los criterios de los distintos remedios empleados en medicina para tratar las enfermedades. Ya desde el Siglo IX se empezaron a crear libros que unificasen y agilizasen el proceso de prescripción y elaboración de los remedios. Éstos eran libros en los que se especificaba la preparación de medicamentos. Y eran de obligado uso para los médicos que prescribían y para los boticarios que los preparaban (que generalmente eran la misma persona), dentro de una misma unidad geopolítica. No obstante, aún eran libros muy rudimentarios.
Origen de la farmacopea
Las Farmacopeas como tal aparecieron a raíz de la división de funciones de los médicos y los farmacéuticos. Esto propició la elaboración de códigos y reglamentos que facilitaran el trabajo de ambos gremios, en beneficio de los enfermos. También empezaron a establecer los primeros precios de medicamentos.
Podemos definir esos primeros escritos como “textos que establecen las características de los preparados y ayuda a armonizar el ejercicio profesional de médicos y boticarios en un determinado territorio”. Gracias a las farmacopeas se puede entender mejor el ejercicio de los farmacéuticos. Esto es así porque definen tanto las prácticas para preservar la salud como las características de los medicamentos.
Primeras farmacopeas españolas y europeas
La primera Farmacopea reconocida, se conoce como “Recetario Florentino”. Fue impreso en Florencia en 1498. Y con él se pretendía eliminar las grandes diferencias que existían en la ciudad de preparar los medicamentos. Además el medicamento recibiría el mismo nombre, fuera donde fuese que se fabricase.
Más tarde aparecieron las Concordias catalanas: Concordia Apothecariutum Barchinonensium publicada en Barcelona en 1511. Y años más tarde surgirían las Farmacopeas zaragozanas: Concordia Aromatariorum civitatis Cesarauguste de 1546, la de Neüremberg Dispensatorium Pharmacopolarum de 1546, luego la Mantua (1559), Colonia (1565)…
Tras estas primeras Farmacopeas surgió la primera Farmacopea estatal en España. Fue publicada en Madrid en 1739 Pharmacopea matritensis. También a nivel mundial entre los siglos XVII y XVIII se publicaron más de 80 farmacopeas. Actualmente España cuenta con 16 Farmacopeas. Y de hecho, la última publicada es la Real Farmacopea Española. Quinta Edición, también existe una farmacopea Europea que se va actualizando para satisfacer las necesidades de sus miembros, procurando dar la mayor difusión a las normas de calidad.
La Real Farmacopea
En España La Real Farmacopea, está constituida por monografías de la Farmacopea Europea, salvo en algunos casos de monografías peculiares españolas. Estas monografías describen la calidad física, biológica y química de los componentes de un medicamento. Así como los métodos analíticos para su control. Todas normas que aparecen en la Farmacopea son exigencias mínimas de obligado cumplimiento por parte de los farmacéuticos.
La Real farmacopea se actualiza periódicamente, por el Ministerio de Sanidad y Política Social, a través de la AEMPS.
En España la Real Farmacopea pertenece al conjunto de libros de tenencia obligatoria en las Oficinas de farmacias. Las farmacias deben disponer de la última edición publicada, que actualmente está disponible en soporte digital por lo que su actualización y difusión es mucho más fácil.
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